Consta de aproximadamente 600 m2 divididos en cuatro plantas que se asoman a un gran patio central con claraboya en el techo, por lo que tiene luz natural durante todas las horas de sol. La primera y la segunda planta tienen una balaustrada de madera de caoba en todo el perímetro del patio.

En la planta baja encontramos un patio central al que da un gran despacho con biblioteca de madera por un lado con ventanal a la calle y un patio interior en el otro extremo por lo que es muy luminoso; un pequeño cuarto que hoy se utiliza como bodega; un cuarto de baño de cortesía; y la entrada peatonal al garaje.

La primera planta tiene una luz preciosa y es dónde se hace más vida, entorno a la cocina - completamente equipada-, y el espacioso salón comedor en forma de L con chimenea. Junto a la cocina, también hay un pequeño cuarto de estar y de televisión; y por último, un dormitorio con baño en suite. Todas estas estancias disfrutan de unas vistas privilegiadas a la Alameda y constan de doble cerramiento.

En la segunda planta se encuentran otros cuatro dormitorios, todos ellos con sus baños incorporados, techos altos, grandes ventanales que favorecen la iluminación natural y un diseño clásico que le otorga el toque tan característico a la vivienda.

En la tercera planta dispone de un espacio muy amplio y luminoso que se ha utilizado como gimnasio; y el acceso a la azotea-solárium, desde la que disfrutar de unas vistas preciosas de la Bahía de Cádiz y de las otras azoteas de la zona.

La propiedad dispone de un ascensor que da servicio a todas las plantas del edificio, aunque también se puede acceder a todas ellas través de una magnífica escalera señorial de madera de caoba maciza. Además, dispone de alarma en todo el edificio.

La casa se encuentra en perfecto estado de conservación, y consta de todos los servicios centrales operativos.

Una oportunidad extraordinaria para adquirir una propiedad única que está deseando abrir sus puertas a su nuevo propietario.