La vivienda principal de 740 m2 se distribuye en tres plantas, en una parcela de 2.500 m2 elegantemente ajardinada y con todo lo necesario para el descanso y disfrute.

Accediendo desde la puerta principal, una joya en sí misma en forma de corona, con puertas de madera lacadas en blanco en forma de arco, nos encontramos con un gran hall de entrada de 50 m2 desde el que se distribuyen varios salones. Llama la atención la espectacular escalera enmarcada por una gran lámpara de araña, suspendida desde una cúpula que ilumina esta señorial estancia.

Cada uno de los salones dispone de chimeneas de gran tamaño y cada estancia ha sido diseñada con grandes ventanales para aprovechar al máximo la luz, otro de los puntos fuertes de la propiedad.

En esta misma planta, se encuentran dos grandes dormitorios en suite con vistas al jardín, y la zona de servicio que consta de cocina completa con office, despensa y cuarto de servicio que cuenta con un cuarto de baño y zona de lavado. Por la cocina se accede tanto a la parte posterior del jardín y zona de barbacoa, como al coqueto comedor que a su vez comunica con el salón principal, una estancia espaciosa y agradable que comunica visualmente con la parte principal del jardín y la piscina, a través de uno de los porches cuyo techo está acondicionado para poder disfrutarlo tanto en invierno como en verano.

El jardín es espectacular gracias a un gran trabajo de paisajismo y cuenta con vegetación consolidada y una gran piscina de estilo ibicenco. Dispone de variadas zonas de estar, así como de comedor de verano y zonas deportivas, con pista de pádel y de baloncesto propias.

A la segunda planta accedemos por una impresionante escalera de roble americano, donde encontramos tres grandes dormitorios (30 m2), todos con cuarto de baño en suite. El dormitorio principal tiene un salón independiente con chimenea, vestidor y un espectacular cuarto de baño de mármol travertino de 18m2. Desde el salón del cuarto principal se accede por una preciosa escalera en espiral a otro de los tesoros de la vivienda, el torreón, actualmente dedicado a estudio-taller con impresionantes vistas del skyline madrileño y una zona solárium de gran magnitud.

La propiedad está preparada con una zona de sótano – pendiente de acondicionar- del mismo tamaño que la planta, a la que se accede desde el jardín trasero, y es perfecta para ampliar la casa si se desea.

En la reforma y acondicionamiento se han utilizado materiales de primera calidad y se ha tenido muy en cuenta el diseño de cada estancia para sacarle el mayor partido.

La calefacción es eléctrica con reguladores independientes en cada estancia, y dispone también de aire acondicionado en algunas estancias. La casa tiene un parking interior con capacidad para cuatro plazas, así como varias plazas exteriores.

Un lujo de propiedad a escasos minutos de la capital lista para acoger a sus nuevos y extraordinarios propietarios.