Ubicado en Lalín, zona de alta calidad ambiental y paisajística, y popularmente conocida como el kilómetro cero gallego por su excelente comunicación con toda Galicia. A 52km de su capital, Santiago de Compostela -que dispone de aeropuerto internacional-, y con muy buenas conexiones con el resto de las principales ciudades gallegas - Lugo a 70 km, Ourense a 50 km, Pontevedra a 68 km, Vigo 91 km, A Coruña a 101 km y Ferrol a 114 km. Cuenta además con estación de tren y autobús.

La vivienda consta de dos plantas de 309m2 cada una más el faiado o bajo cubierta. Desde el gran vestíbulo encontramos las escaleras a la planta baja, con un dormitorio y el baño principal, el resto de las estancias son zonas dedicadas a almacén y bodega donde estaban las antiguas cuadras, se encuentran sin acondicionar y precisan rehabilitación.

La escalera de subida a la planta noble o principal es de piedra y castaño, aquí es donde los propietarios actuales hacen la vida y donde encontramos: la cocina que conserva la antigua lareira de piedra con estufa de leña integrada y horno, electrodomésticos actuales y encimera de granito; un comedor de gran tamaño con alacena empotrada y cristalera antigua; un agradable salón con vistas al jardín, varios pasillos y distribuidores, los cuatro dormitorios de gran tamaño y con posibilidad de incorporar baños en suite; y un aseo. Además, en el exterior de esta planta existe un patín con las escaleras principales que rematan en un corredor a través del cual también se accede a la vivienda.

El faiado es un espacio extra bajo la cubierta, actualmente para rehabilitar, y al que también se le podría sacar partido por ejemplo como una agradable zona de biblioteca.

Las vigas de toda la casa, así como los suelos, son los originales de castaño, con techos también de madera en varias de las estancias, muros de piedra y sillería de granito en puertas y ventanas. Se conservan también elementos estructurales e históricos como las columnas de piedra en el patín, en la fachada oeste un balcón con el antiguo escudo de armas en piedra y un dintel con cruceiro en el portón principal de la finca con la inscripción original de la familia “Feijoo”.

En el exterior, un frondoso y verde jardín de unos 1876 m2, en el que destaca un nogal centenario, la huerta con frutales del país y un imponente seto de camelias cerrando la parcela por su fachada principal.

Incluye, además, la mayoría del mobiliario y una parcela rústica cercana al pazo destinada a pinar maderable de unos 9.000m2, situada en la ladera norte del Monte das Penas y junto al rio Asnerio. Desde el pazo es un camino muy agradable para realizar los fines de semana.

La propiedad cuenta con agua de red, electricidad, fosa séptica y un pozo para regar. Está cerrada con muro de piedra perimetral y el acceso es asfaltado.

Una propiedad extraordinaria y lista para continuar su bonita historia.