Tas Careaga: "Vivir en una iglesia como ésta produce sensación de libertad"
Este joven diseñador bilbaíno se embarcó hace 3 años en un proyecto que nunca pensó le haría tan popular. Convertir una iglesia del siglo XVI en un auténtico hogar de capricho, moderno y con todas las comodidades, no es algo habitual. Este sueño hecho realidad ha aparecido en multitud de medios nacionales e internacionales y su increíble transformación la ha llevado a ser incluida entre las 10 mejores propiedades restauradas del mundo, por la revista Dwell.
Pero Tas es ambicioso y ya piensa en otros proyectos arquitectónicos que poner en marcha. Antes, tendrá que vender el que ha sido su hogar durante los últimos años. Una tarea para la que cuenta con The Singular Space, expertos en propiedades extraordinarias. En esta entrevista nos desvela cómo encontró la propiedad, situada en Vizcaya y rodeada de naturaleza, y algunos de los detalles de su reforma que la hacen todavía más especial.
¿Cómo se vive en una iglesia del siglo XVI?
En este caso es un mix de espacio singular y plena naturaleza. Decidí dejar un tercio del interior edificio totalmente abierto, diáfano, por lo que se sigue apreciando que es una iglesia. Los techos de 10 metros de altura dan una sensación de espacio brutal… Al abrir un gran ventanal hacia el valle, sientes la montaña dentro de casa… Podría definir la sensación como de libertad.
¿Podrías darnos algún detalle de su historia?
Se construyó en 1530 y en el siglo XVIII se reformó para ampliar el campanario. A lo largo de la historia ha tenido otras reformas, pero lo que queda actualmente es original del siglo XVI.
¿Cuándo adquiriste la propiedad? ¿Cómo fue y qué buscabas?
Estuve muchos años buscando un edificio singular en el campo, algo que me permitiera hacer un proyecto especial, que me posibilitara pensar en cosas que se salieran de lo común… En 2016, tras muchas horas de búsqueda, encontré esta iglesia en estado de ruina y me puse manos a la obra.
¿Qué te atrapó de ella?
La amplitud de espacio y el entorno. Es una mezcla muy inusual y me pareció única.
¿Fue complicada la reforma?
La reforma principal supuso tres años de mucho trabajo, mucho papeleo y mucho proyecto. Una vez arreglada, las mejoras posteriores que he ido haciendo han resultado más fáciles… pero los tres primeros años fueron una auténtica locura.
¿Qué elementos la hacen especial?
Para mí, lo que hace esta casa única es el hecho de estar entre muros que llevan en pie 500 años y que el interior sea algo muy personal. Considero la actuación en el interior casi como una intervención artística. Hay muebles que he diseñado y construido yo mismo y otros que llevan generaciones en mi familia, por lo que la mezcla es súper personal y única. No encaja en ningún estilo, es simplemente “La iglesia de Tas”.
¿Cuál ha sido el toque personal que le has dado?
El 100% del interior es muy personal. Mis fotos, mis cuadros, mi colección de arte, los muebles de mi familia o los que he hecho yo mismo… Por lo que podría decirse que mi toque personal es el proyecto completo.
¿Qué rincón te parece más peculiar?
Hay tres sitios que a mi entender lo son: la cocina en el altar, la zona de chimenea con ventanal y el actual estudio, que se podría convertir en otra suite.
¿Has pensado en darle otra utilidad, además de la de vivienda?
Ya he hecho algún concierto, y algún que otro evento. Es un espacio muy abierto y flexible, por lo que se pueden hacer muchas cosas… En mi cumpleaños, antes de la pandemia, nos juntamos 150 personas muy cómodamente.
"Para mí, lo que hace esta casa única es el hecho de estar entre muros que llevan en pie 500 años y que el interior sea algo muy personal."
Tas Careaga
¿Cómo es el entorno en el que se encuentra ubicada?
En mitad de un bosque… Está en un entorno urbano de unas 7 casas, cerca de la carretera, por lo que el acceso es muy bueno. Sin embargo, todo el diseño se ha orientado para poder disfrutar de las vistas del valle, por lo que desde dentro de casa y desde el jardín no ves más que la antigua estación a unos 500 metros. El resto es río y montaña.
¿Por qué has decidido ponerla a la venta? ¿Tienes en mente algún otro proyecto similar?
Es el mayor proyecto que he hecho en mi vida y del que más orgulloso me siento, pero soy joven y creo que hay que seguir haciendo cosas. Con 36 años no me puedo plantar por muy feliz que esté aquí. La venta me permitiría hacer otro proyecto. Actualmente, tengo varias cosas en proceso y espero que surjan muchas más.