11 imprescindibles en tu visita a Toledo
Visitar Toledo es una experiencia que invita a repetir. La llamada ‘ciudad de las tres culturas’ traslada a tiempos remotos, donde judíos, cristianos y musulmanes dejaron un legado que ha convertido la capital manchega en una joya de enorme atractivo cultural. Su casco histórico, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco, conserva el trazado de la Edad Media y alberga un impresionante conjunto monumental. Si tienes pensado conocerla en un solo día, te recomendamos algunos lugares y experiencias que no deberías perderte:
Catedral de Santa María.
Obra maestra de la arquitectura gótica, donde se encuentra la campana más grande de España y una de las de mayor tamaño de toda la cristiandad, de casi tres metros de diámetro y cerca de 18 toneladas de peso. En su recorrido, podrás visitar sus impresionantes capillas y admirar las vidrieras y tesoros que alberga este imponente edificio. Si miras hacia arriba, podrás ver colgados del techo varios capelos cardenalicios que pertenecieron a los arzobispos de Toledo enterrados en la catedral.
El Alcázar.
Ubicado en la zona más alta de la ciudad, sus orígenes se remontan a la época romana. El edificio ha estado marcado por distintos hechos históricos (la Guerra de Sucesión, la Guerra de la Independencia, la Guerra Civil Española...), en los que fue objeto de asedios, destrucciones o incendios. Actualmente, es sede del Museo del Ejército y de la Biblioteca Regional de Castilla-La Mancha.
Iglesia de Santo Tomé.
Fundada en el siglo XI, alberga una de las pinturas más famosas de El Greco, ‘El entierro del Señor de Orgaz’. Una de las pocas obras cumbre de la pintura universal que permanece en el lugar para el que fue creada, la capilla funeraria de la iglesia donde se dice que tuvieron lugar las exequias del citado personaje de la aristocracia.
Plaza de Zocodover.
Ha sido el centro neurálgico de la ciudad durante la mayor parte de su historia. A escasos metros del Alcázar, su denominación de origen árabe significa “mercado de bestias”, por ser el lugar donde siglos atrás se realizaba la compraventa de animales de trabajo.
Visitar Cromática.
Un museo único en el mundo en el que pintura, música, historia y ocio, comparten espacio en un edificio histórico, el del Monasterio de la Inmaculada Concepción, con música en vivo y los mejores cócteles. Un lugar por el que han pasado o vivido personajes tan ilustres como Abderramán III, El Cid Campeador, Carlo Magno, Isabel la Católica, Alfonso X El Sabio o San Juan de la Cruz, entre otros...
Comprar mazapán artesano.
Delicioso dulce típico toledano, elaborado a base de almendra y azúcar, que podrás adquirir en pastelerías o en los conventos de la ciudad, como el de las Comendadoras de Santiago, el de San Clemente, Santo Domingo el Antiguo, San Antonio de Padua o el de Santa Isabel de los Reyes, entre otros. Si no lo has probado aún, te recomendamos que lo hagas. ¡No te arrepentirás!
Visitar las termas romanas.
Trasládate a la época romana y conoce este fascinante tesoro oculto bajo las calles del casco antiguo. Aunque no se conservan en su totalidad, los restos descubiertos permiten vislumbrar la grandeza de su arquitectura original, con mármoles y sistemas de calefacción subterráneos.
Sinagoga de Santa María la Blanca.
La mayor y más bella sinagoga de España. En pleno barrio de la Judería, encontramos este magnífico edificio del siglo XII que sirvió de centro de culto a los judíos de la época. De estilo mudéjar, consta de cinco naves separadas por pilares en los que descansan un buen número de arcos de herradura. Un lugar de incomparable belleza que no te defraudará.
Monasterio de San Juan de los Reyes.
Este monasterio franciscano del siglo XV mezcla los estilos gótico y mudéjar. Más de 200 cadenas cuelgan de su fachada, en realidad los grilletes de los cautivos cristianos liberados por los Reyes Católicos en sus conquistas por Andalucía. Si lo tuyo es curiosear, busca en los muros de su precioso claustro la figura de un mono con un libro sentado en un orinal. Una representación con la que, según cuenta la leyenda, el autor quiso inmortalizar a un monje que supervisaba con demasiado celo las obras del edificio.
Conocer la técnica del damasquinado.
Siguiendo la tradición árabe, esta artesanía milenaria típica de Toledo se aplica a todo tipo de objetos que podrás encontrar en multitud de establecimientos del casco antiguo. El popularmente llamado oro de Toledo se puede realizar, a mano o a máquina, con oro de 24 quilates o plata incrustado sobre hierro, cobre o acero. El brillo y la suntuosidad de los preciosos metales contrasta con los tonos oscuros de los metales menos nobles logrando un resultado de gran belleza plástica.
Mezquita del Cristo de la Luz.
No te pierdas el edificio en pie más antiguo de Toledo, considerado un ejemplo único de supervivencia del arte de Al-Ándalus. Originalmente una mezquita califal, fue transformado en iglesia en el siglo XII, añadiendo un ábside mudéjar. Cuenta la leyenda que una pequeña piedra blanca situada en la calzada de acceso fue donde, después de ver la imagen de Cristo alumbrado por una luz, se arrodilló el caballo de Alfonso VI cuando entró a reconquistar Toledo.