Guadalajara, un tesoro por descubrir

Es una de las grandes desconocidas de nuestra geografía. Una provincia que esconde preciosas rutas y lugares donde disfrutar del paisaje, la arquitectura y la gastronomía. Situada a pocos kilómetros de Madrid, Guadalajara se nos presenta como una oportunidad para residir o pasar unas vacaciones lejos del mundanal ruido de la gran ciudad.

Ha sido escenario de grandes obras de la literatura. El premio Nobel Camilo José Cela recorrió estas magníficas tierras en una de sus novelas (‘Viaje a La Alcarria’). También el Arcipreste de Hita, Alfonso X el Sabio, Ernest Hemingway y Julio Caro Baroja, entre otros, describieron la provincia castellanomanchega en sus escritos. Sus paisajes, sus monumentos, sus costumbres...

Y es que Guadalajara alberga ciudades y villas muy recomendables para visitar, como la propia capital, Guadalajara, Cifuentes, Brihuega, Sacedón, Pastrana, Mondéjar, Jadraque, Trillo, Sigüenza, Hita, Atienza o Torija, entre otras muchas, que salpican “este hermoso país al que a la gente ya le va dando la gana ir” (‘Nuevo viaje a la Alcarria’, Camilo José Cela).
Imposible perderse la ruta de los pueblos negros o los pantanos de Entrepeñas y Buendía, el Parque Natural del Alto Tajo, el Hayedo de la Tejera Negra y el Bosque de Valdenazar.

Desde el punto de vista arquitectónico, Guadalajara puede presumir de varias joyas históricas como el Palacio del Infantado, la Capilla de Don Luis de Lucena, el Torreón del Alamín, el Palacio de la Cotilla, el Convento de La Piedad o la Parroquia de San Ginés. Imprescindible visitar también los castillos de Sigüenza, Zafra (Campillo de Dueñas), Molina de Aragón y Torija, el Palacio Ducal de Pastrana y la catedral de Santa María (Sigüenza), por mencionar solo una parte de su inmenso patrimonio monumental.

Guadalajara es también tierra de gastronomía. En sus numerosos restaurantes podremos degustar asados de cordero y cabrito, cochifrito, sopas de ajo y morteruelo. Sin olvidar los deliciosos y almibarados bizcochos borrachos y, por supuesto, la miel alcarreña.

Molinos, casas solariegas y castillos

Si quieres disfrutar de esta tierra pasando temporadas o incluso viviendo en ella, en The Singular Space te ofrecemos varias opciones. Como este molino rehabilitado del siglo XVI en Sigüenza. Cálido y acogedor, conserva su fachada en piedra y un histórico arco con una gran puerta de madera para acceder a su interior.