Un paraíso escondido en Chinchón
Jan y Karin son los orgullosos propietarios de esta preciosa casa de campo a las afueras de Chinchón (Madrid), donde ocio y negocio conviven en perfecta armonía. En 2019, y tras dos años y medio de remodelación, hicieron realidad su sueño de dedicarse a la hostelería en un entorno tranquilo rodeado de naturaleza. Hoy, 6 años después, ponen fin a una etapa y se trasladan a otro lugar. No sin antes contarnos, en este nuevo capítulo de My Singular Space, los atractivos de esta encantadora propiedad.
Cuando Jan y Karin salieron de Holanda en busca de un lugar donde poner en marcha un negocio hotelero no podían ni imaginar que lo iban a encontrar en Chinchón, a poco más de 60 kilómetros de Madrid. Tras varios meses de búsqueda intensa, se toparon con esta finca situada en un paraje de hermosas vistas que invitaba al descanso y el relax. Justo lo que andaban buscando.
Cuentan que en sus orígenes este terreno fue un olivar del que todavía se conservan 40 olivos de más de 400 años, que les han permitido en este tiempo elaborar su propio aceite. Su anterior propietario lo convirtió en una hermosa finca con casa y jardín que, años después, esta pareja terminó de rematar. “Es todo un privilegio poder vivir aquí. Un lugar confortable y tranquilo, pero cerca de una gran ciudad”, comentan.
La propiedad, ubicada en una parcela de casi 7.000 m², ofrece un entorno exuberante con fuentes, zonas de descanso y rincones con un encanto muy especial. Destaca su singular piscina, que conserva la estructura de una antigua alberca que aporta un carácter único al conjunto.
La casa, de fachada blanca y contraventanas azules, cuenta con un amplio porche que invita a celebrar reuniones con amigos o en familia. La vivienda principal se ubica en la planta alta, mientras que la planta baja alberga tres estudios privados completamente equipados.
Un enclave perfecto para relajarse y descansar, tanto en invierno como en verano. “Hemos disfrutado mucho de los días de invierno dentro de la casa, con la chimenea encendida. Sabiendo que estás en un lugar donde hay tranquilidad y silencio, pero también seguridad... En verano es una delicia bañarse en la piscina por las tardes. ¡Qué mejor plan que darse un chapuzón al terminar el día! Es lo que te hace sentirte relajado. Un lugar que te permite desconectar y recargarte de nuevo para recuperar toda la energía”, señalan.
Parte de una comunidad
Más allá del entorno, el jardín o la casa, otro de los atractivos de esta propiedad es sin duda la gente de Chinchón. Un lugar maravilloso donde los vecinos son muy amables... “En los primeros días del confinamiento, llamaron a la puerta. Era un vecino que nos traía hortalizas de su huerto. Nos dijo: “sé que no sois de aquí y que no podéis salir. Tomad esto”. Aquello fue verdaderamente conmovedor. Es algo a lo que no estamos acostumbrados. La sensación de vivir juntos, de formar parte de una comunidad. Así es este lugar, tienes tu privacidad pero no estás solo”.
¿Buscas tu paraíso escondido? Si quieres conocer los rincones más especiales de nuestras propiedades, sigue esta sección. Podrás conocerlos de mano de sus propietarios y dejar tus comentarios en nuestro canal de YouTube.
